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Fuente: motorgiga.com | Source link | Por Carlos Antón Adán

 

https://motorgiga.com/

 

El pasado miércoles se publicaba en el BOE la nueva regulación a través de la cual pasa a ser la legal la circulación de los famosos megacamiones de 60 TN y 25,25 metros por nuestras vías. Una polémica decisión, que al final no lo es tanto, dada la limitación que existirá en el empleo de estos colosos de la carretera, como trataremos de explicaros a continuación.

 

Si, es cierto que a partir de ahora podrán circular por la carretera camiones de hasta 60 TN de MMA y 25,25 metros de longitud, pero no afectará al grueso del transporte en nuestro país por un buen número de restricciones. En primer lugar, aquellos que quieran hacer uso de un megacamión en España habrán de solicitar una autorización especial a la DGT o al órgano competente en tráfico en las regiones con esta competencia transferida (en caso de que el vehículo sólo vaya a moverse por el territorio autonómico).

 

Dicha autorización quedará supeditada al tipo de mercancía, quedando fuera las mercancías peligrosas, y establecerá el recorrido por el que circulará el megacamión.  Este recorrido habrá de ser principalmente por autopistas y autovías, reduciendo el uso de vías convencionales a un máximo de 50 km. Puntualizar que sólo se autorizarán rutas cuya longitud sea superior a los 150 km.

 

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Scania se ha mostrado como la apuesta segura para adquirir un vehículo que vaya a ser usado como megamión.

 

Según informan desde FENADISMER, los vehículos que ostenten estas autorizaciones deberán de cumplir con cierta normativa medioambiental Euro -suponemos que Euro 6-, y además deberán de disponer de un determinado equipamiento de seguridad. De igual forma el conjunto de vehículos tendrá que estar correctamente señalizado, mediante rotativos y un rótulo específico que identifique su mayor dimensión.

 

La velocidad máxima para megacamiones es la misma que para un camión común: 90 km./h en autopistas y autovías, y 80 km./h en carretera convencional.

 

El resultado que se espera de su implantación es la mejora de la competitividad del transporte por carretera. Traduciéndolo a cifras, esto podrá suponerun ahorro de costes de entre un 15 y un 50% para las rutas de aprovisionamiento a fábricas, siendo los fabricantes de automóviles uno de los sectores industriales que mayor partido podrán sacar a la nueva normativa, algo muy aplaudido por la patronal de automoción ANFAC.La mejora medioambiental también será significativa, reduciéndose las emisiones de CO2 y de otros gases contaminantes. 

Fuente: motorgiga.com | Source link | Por Carlos Antón Adán